Pieza del mes de agosto de 2011 Serie Año Internacional de los Afrodescendientes Champán en el río Magdalena - Colombia Colección de Arte. Área de Artes Gráficas. Subárea de estampas. Sala Federalismo y Centralismo, segundo piso.
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Ramón Torres Méndez Champán en el río Magdalena - Colombia 1878 Litografía en color Registro 3776 25,5 x 34,7 cm Donado por el Banco Popular (20.11.1996) ...
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2011 – Año Internacional de los Afrodescendientes
A partir de las declaraciones de los Derechos Humanos, los pactos firmados, la Declaración y el Programa de Acción de Durban de 2001, y como una manera de recordar a las víctimas de la esclavitud y la trata transatlántica de esclavos, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 2011 Año Internacional de los Afrodescendientes. El programa de la Pieza del mes mostrará algunos de los objetos que representan y hacen memoria de la participación de los afrocolombianos en la construcción de la nación, para unirse a esta conmemoración.
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Durante el siglo XIX el champán fue el principal medio de transporte por el río Magdalena. Consistía en una canoa ancha, de aproximadamente 11 m de largo cubierta en la parte central por un techo de paja, sobre el cual se encaramaban los bogas para empujar la embarcación con una larga palanca que daba hasta el fondo del río. Debajo se amontonaban los viajeros y el equipaje de recorridos que podían durar varias semanas.
El boga empujaba los enormes champanes contra la corriente del río, desde Mompós a Honda, lo cual significaba un mes de doce horas diarias de trabajo agotador, con sólo dos o tres descansos cortos al día. Mientras seguía su rítmico remo cantaba todo el tiempo, desde el amanecer hasta la noche, callándose únicamente para comer y para cruzar el río.
“Los bateleros que teníamos a bordo eran trece con el patrón que a la vez hacía de piloto; pertenecían a esa clase de gentes que en el país se llaman bogas y que se reclutan entre los negros, los mulatos y los indios de sangre mezclada […] casi todos ellos jóvenes, se distinguían por sus formas atléticas y por su aspecto imponente, debido a su aire arrogante y a las hermosas proporciones de sus miembros”.
“Hasta el cierto punto se podría concebir que la profesión de boga la escogiesen únicamente cierta clase de gentes rudas que no tuviesen más que aptitudes para ser cargadores, si por lo menos encontraran en elevados salarios una compensación por el quebranto prematuro de salud y recursos para la vejez […]”
Auguste Le Moyne
Viajes y estancias en América del sur