Con sus figuras siempre sobrias y llenas de vida, el artista Ignacio Gómez Jaramillo (Medellín, 1910 - Coveñas, 1970) transfigura y expresa la atmosfera de su tiempo con sosegado realismo. Compuesta por 10 obras, esta exposición reúne pinturas al óleo que navegan entre diversos géneros: desnudo, retrato y paisaje. Elaboradas durante más de dos décadas de trabajo, estas piezas dan cuenta de un lenguaje plástico en donde la cadencia de las formas, el volumen y el color deviene en rigor geométrico, bloques de paisajes y recios perfiles.
Gómez Jaramillo fue un artista de intensa formación y reconocimiento precoz. Sus viajes a Barcelona (1929), Madrid (1931), París (1932) y Ciudad de México (1936) contribuyeron a que consolidara una pincelada moderna, que rompe con el academicismo y naturalismo predominante en la esfera del arte en Colombia. Su trabajo se abre a la reevaluación de lo propio con sus retratos íntimos o al cuestionamiento de mitos históricos con sus escenografías monumentales. Entre las obras más reconocidas de este pintor se encuentran los dos murales que realizó en el Capitolio Nacional en Bogotá (1938): La liberación de los esclavos y La insurrección de los comuneros, así como el óleo sobre tela Madre del Pintor, obra incluida en esta muestra y ganadora del premio en pintura en el Primer Salón Nacional de Artistas de 1940.
Ignacio Gómez Jaramillo: “Soy un pintor y ello me basta” forma parte del programa de Exposiciones Itinerantes del Museo Nacional de Colombia, con el que se busca presentar al público de varias ciudades del país y del exterior algunas de las obras que alberga el Museo, para dar a conocer así parte de nuestro patrimonio cultural.